Información de fondo

Diagnóstico prenatal de cardiopatías congénitas

  • El uso de la ecocardiografía fetal ha contribuido a registrar una reducción sustancial de la tasa de mortinatalidad, mortalidad en el primer día de vida, así como de la tasa de mortalidad neonatal en la primera semana de vida.
  • Se ha producido una disminución general en el número absoluto de fallecimientos debidos a cardiopatías congénitas durante estos últimos años gracias a las mejoras conseguidas en la asistencia perinatal y la cirugía cardíaca. En parte, esto podría atribuirse a una tasa de natalidad inferior de algunas cardiopatías más complejas en las que existe una tendencia principal a la interrupción del embarazo.

Diferencias cualitativas

  • Existen grandes diferencias en la tasa de detección dependiendo del país.
  • La tasa de detección más elevada se ha localizado en países de la zona de Europa Occidental.
  • La tasa de detección más baja se ha localizado en países de Europa del Este y en aquellos que carecen de políticas de monitorización oficial.
  • La fiabilidad de los resultados de las pruebas depende en gran medida de la pericia del facultativo.

Diagnóstico prenatal de cardiopatía congénita e interrupción del embarazo

  • A pesar de su utilidad en la preparación de la atención médica postnatal, el diagnóstico prenatal de las malformaciones cardiacas congénitas también puede llevar a la interrupción del embarazo en varios casos.
  • Entre 1995 y 2000, la detección prenatal de las cardiopatías congénitas provocó abortos en el 15% de casos, de los cuales un 45% se interrumpieron por cardiopatías congénitas complejas (según un estudio llevado a cabo en Francia en 2005).
  • Las cifras de interrupción del embarazo son más elevadas en otros informes, principalmente con respecto a cardiopatías congénitas complejas, y varían en función de las convenciones sociorreligiosas locales.
  • En la mayoría de países europeos, la interrupción del embarazo sólo se permite hasta cierta edad gestacional (normalmente alrededor de las 22 y las 24 semanas de gestación). Sin duda, esto atribuye presión emocional a los padres que se enfrentan a la decisión de cómo gestionar el diagnóstico prenatal con una cardiopatía congénita, dado que el promedio de edad gestacional al recibir el diagnóstico suele oscilar entre 20 y 24 semanas. Esto provoca que el tiempo que tienen los padres para tomar decisiones sea muy breve.